El Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección de Vialidad, inició oficialmente el proceso de expropiaciones para la construcción de la esperada doble vía al aeropuerto El Tepual, una obra estratégica para mejorar la conectividad en el sector norte de Puerto Montt y facilitar el acceso al principal terminal aéreo de la Región de Los Lagos.
Con una inversión estimada de $75 mil millones de pesos, el proyecto contempla una ruta moderna de 11,5 km entre el kilómetro 0,3 (sector Liceo Bosque Nativo) y el aeropuerto El Tepual, beneficiando directamente a más de 20 mil familias de sectores como Puerto Azul, La Lagunita, Portal Sur y Fresia. Además, no tendrá peaje, según confirmaron las autoridades regionales.
¿Por qué se hará por etapas y no como una obra única?
Una de las principales inquietudes de la comunidad es por qué el proyecto se desarrollará en tres etapas y no como una obra unificada. La explicación radica en criterios técnicos, administrativos y financieros que buscan garantizar su viabilidad y acelerar su ejecución.
“Si licitamos todo como un solo contrato de $75 mil millones, corremos el riesgo de que ninguna empresa participe. Ya nos ocurrió con la obra en el paso Cardenal Samoré, donde una obra de la mitad del valor fue licitada tres veces sin éxito”, explicó Jorge Loncomilla, director regional de Vialidad.
Este fenómeno no es aislado. Durante y después de la pandemia, muchas empresas constructoras quebraron o redujeron su capacidad operativa, lo que ha generado un mercado menos competitivo para contratos de gran escala. Ante este escenario, la Dirección de Vialidad adoptó una estrategia que ha dado buenos resultados en otras obras: dividir los proyectos en tramos menores, para hacerlos más atractivos, manejables y licitables por múltiples empresas.
Las tres etapas: eficiencia y flexibilidad
La obra se dividirá así:
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Etapa 1: Desde km 0,3 (Liceo Bosque Nativo) hasta sector Petrobras – 3 km.
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Etapa 2: Hasta km 8 (sector intermedio).
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Etapa 3: Hasta km 11,5 (aeropuerto El Tepual).
Cada etapa podrá ser licitada de manera independiente, permitiendo que varias empresas trabajen en paralelo, lo que no solo evitaría retrasos por falta de interesados, sino que podría acortar los plazos de ejecución total.
“Dividir el proyecto en fases no significa que demoraremos más. Por el contrario, nos da flexibilidad para avanzar más rápido si contamos con el financiamiento y las capacidades técnicas. Se trata de repartir los riesgos y asegurar que el proyecto comience”, agregó el diputado Héctor Ulloa, quien ha impulsado activamente la iniciativa.
Este enfoque ya ha sido aplicado en la doble vía Calbuco–Empalme y en otras obras emblemáticas de la región, como la Costanera de Puerto Montt.
Un plan progresivo, pero con metas claras
Actualmente, se trabaja en la etapa de expropiaciones, con 102 lotes identificados. Ya se obtuvo la Resolución Satisfactoria (RS) por parte de la Subsecretaría de Evaluación Social, lo que permitirá contratar peritos tasadores durante este año. El objetivo es avanzar con al menos el 50% de las expropiaciones en 2025 y licitar la primera etapa en 2026.
“Este proyecto mejora la calidad de vida de quienes viven en Tepual, Lagunita, Puerto Azul y otros sectores urbanos. No es una carretera solo para quienes toman avión. Es una obra de justicia territorial y conectividad local”, afirmó la concejala Bárbara Álvarez.
No habrá peaje: vecinos pueden estar tranquilos
Frente a rumores sobre la eventual instalación de un peaje urbano, las autoridades fueron enfáticas: no se cobrará por usar esta ruta, dado que se trata de una vía urbana financiada con fondos públicos.
“Aquí viven más de 20 mil personas. No es viable ni justo instalar un peaje dentro de la ciudad para llegar a casa. Este es un proyecto del Estado y no será concesionado”, recalcó Loncomilla.